Los ríos son componentes esenciales del paisaje continental. Su trabajo erosivo moldea el relieve, forma valles, corta cañones y deposita materiales en sus tramos bajos originando amplias llanuras aluviales. Para la vida en el medio terrestre son esenciales. Llevan agua y nutrientes a plantas y animales y transportan a los organismos y a sus estructuras reproductoras. Son muy usados por el hombre para suministro de agua, deposición de residuos, producción pesquera, etc.
Desde el punto de vista ecológico es totalmente diferente el funcionamiento de los tramos alto, medio y bajo:
En el curso alto el agua lleva pocos nutrientes pues no ha tenido tiempo de disolver o arrastrar minerales ni otras moléculas. El agua está bien oxigenada pues es fría y está agitada. Debido a la fuerte corriente no se pude desarrollar el fitoplancton y hay poca fotosíntesis: el ecosistema es heterotrofo (más respiración que producción) y los organismos obtienen la energía de los nutrientes que afluyen desde la cuenca, arrastrados por las aguas de lluvia. Esta es la zona del río apta para los salmónidos (trucha y salmón) que necesitan aguas bien oxigenadas. También son frecuentes los cangrejos, tritones, desmán de los Pirineos, martín pescador, mirlo acuático, etc.
En el curso medio el lecho es más amplio y menos abrupto, las corrientes tienen menos fuerza y crecen plantas que se sujetan al lecho del río. El río es más autotrofo producción/respiración .mayor que 1 frecuentemente). La diversidad de especies suele ser máxima. Es el lugar de los barbos, nutrias, ranas, etc.
En el curso bajo las corrientes son lentas y las aguas fangosas y al haber menos luz se hace menos fotosíntesis, por lo que el río de nuevo es heterotrofo y hay poca variedad de especies en la mayoría de los niveles tróficos. Los peces más frecuentes son tencas, percas, lucios, anguilas, etc.
Los ríos son ecosistemas bien adaptados para el tratamiento de residuos: "alcantarillas gratuitas", porque tienen gran poder de regeneración de las aguas, pero han sido muy alterados por el hombre, a veces hasta destruir la vida casi totalmente en muchos tramos de ellos. Es muy difícil hallar un río auténticamente natural. Las ultimas lluvias an provocado el desvodamiento de los caudales de los ríos provocando grandes inundaciones en las ciudades con pantanos y su debordacion de ellos. Los ríos nacen en manantiales en los que surgen a la superficie aguas subterráneas o en lugares en los que se funden los glaciares. A partir de su nacimiento siguen la pendiente del terreno hasta llegar al mar.
Un río con sus afluentes drena una zona que se conoce como cuenca hidrográfica. La separación entre cuencas es la divisoria de aguas.
Desde su nacimiento en una zona montañosa y alta hasta su desembocadura en el mar el río suele ir disminuyendo su pendiente. El perfil longitudinal muestra muy bien el transcurrir del río hasta que llega al mar. Normalmente la pendiente es fuerte en el primer tramo del río, cuando viaja por las montañas (tramo alto), y se hace muy pequeña, casi horizontal, cuando se acerca a la desembocadura (tramo bajo). La desembocadura marca el nivel de base del río.
El río sufre variaciones en su caudal. En las estaciones lluviosas aumenta y en las secas disminuye, aunque algunos ríos presentan el caudal máximo en la época del deshielo. Las crecidas pueden ser graduales o muy bruscas, como la de un afluente del Elba que en 1927 creció cuatro metros en dos minutos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario